¿Qué son los detectores de humo?

Las alarmas contra incendios para el hogar son dispositivos que detectan la presencia de humo en una habitación y advierten de la posibilidad de incendio. Su funcionamiento es sencillo. Cuando salta una alarma de incendio es porque ha detectado ese elemento y manda una alarma para que las personas de esa habitación estén a salvo.

Cuando se activa la señal de alarma, la recepción de alarmas comprueba si la alarma es real y explica cómo apagar el detector de humo; o notifique al departamento de bomberos si es un informe verdadero.

¿Qué son los detectores de humo?

Según su trabajo y los principios físicos del dispositivo, las alarmas contra incendios se pueden dividir en cuatro tipos:

• Detectores de humo fotoeléctricos u ópticos:

Estos detectores de humo son más efectivos en incendios de combustión lenta. Estos son los que producen grandes cantidades de humo pero normalmente se queman sin llama. Por ejemplo, en cortinas, sábanas, muebles blandos, alfombras…

El funcionamiento de los detectores ópticos de humo se basa en el envío de luz que incide de forma continua sobre la fotocélula. Si el humo oscurece la luz, el dispositivo se activa con una señal acústica que advierte de un incendio.

Estos detectores suelen instalarse en los conductos de aire de viviendas, edificios y/o habitaciones.
Se pueden instalar tres tipos:

1. Rayo infrarojo.
2. Láser.
3. tipo puntual.

Hoy en día, los detectores ópticos son los más efectivos para la protección de activos, por lo que su instalación es sinónimo de seguridad. Los detectores ópticos de humo cubren aproximadamente 60 m2 en condiciones normales, aunque esto depende de varios factores de la vivienda (altura del techo, altura de la habitación, si hay vigas u otras barreras de humo…).

Preste siempre atención a si funciona correctamente. Puede hacerlo comprobando si el LED parpadea. Esta es una señal de que todo sigue el uso correcto.

• Detectores de humo iónicos:

Estos dispositivos responden a los incendios más rápido con una llama rápida y menos humo. Cuando se producen estos incendios, la causa suele ser el combustible o productos inflamables (periódicos, productos de limpieza…).

El funcionamiento de los detectores de iones es sencillo. El dispositivo ioniza el aire interior y si hay un bloqueo de la corriente eléctrica por humo, activa la alarma. Cuando la conductividad del aire disminuye, se activan estas alarmas de incendio.

• Detectores térmicos:

Más que alarmas contra incendios, son detectores de incendios. Y estos dispositivos son los encargados de controlar las fluctuaciones de temperatura en la habitación/área de trabajo. Aunque su propósito es detectar un incendio en la escena, no se considera una alarma de incendio como tal.

Los sensores de calor dan una alarma cuando la temperatura está por encima de los 68º. Por lo tanto, a veces se las considera no tan efectivas como otras alarmas contra incendios. Las cocinas son un lugar ideal para ponerlas a expensas de los detectores fotoeléctricos de humo. Porque estos segundos pueden activarse simplemente por el vapor caliente producido por diversas técnicas de cocción.

• Detectores de radiación:

Lo mismo ocurre con los detectores de calor, son más alarmas contra incendios que alarmas contra incendios en sí mismas. Estos dispositivos se activan cuando detienen la radiación de ciertos materiales durante un incendio. Cuando se detectan ciertos niveles, envían su sistema de alarma para alertar a los pasajeros.

Estos se consideran indicadores de detección tardía, pero se debe considerar el cuidado y la limpieza. Y si no están en perfecto estado, es más fácil que se desensibilicen y se activen en situaciones que no sean de incendio, provocando falsas alarmas.

Si quieres equipar tu hogar con estos sistemas de alarma, lo ideal es que contactes con los expertos y no intentes aprender a instalar alarmas contra incendios tú mismo. Y son estos especialistas los que saben identificar los puntos estratégicos de su instalación y así asegurar su funcionamiento.

Asegúrese siempre de que los detectores de humo estén homologados y evite fallos de funcionamiento y falsas alarmas.

Publicado el 21 de marzo de 2023