Los vigilantes tienen la facultad de detener a sospechosos

Seguramente muchas personas se han preguntado en alguna ocasión si un vigilante de seguridad privada tiene la facultad de detener a algún individuo por haber cometido un acto delictivo o infracción. Y la respuesta es sí. De hecho, no sólo puede, sino que también debe hacerlo.

Y es que la Ley de Seguridad Privada vincula a todo agente de seguridad a «evitar la comisión de actos delictivos o infracciones». Asimismo, se le compele a «poner inmediatamente a disposición de los miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad a los delincuentes», así como «los instrumentos, efectos y pruebas de los delitos».

Así pues, queda evidente la necesidad de realizar este tipo de acción en caso de que las circunstancias lo requieran.

Eso sí, es conveniente aclarar que dicha detención sólo puede tener lugar en el marco de una serie de condiciones. Por ejemplo, deben ser hechos en relación con la seguridad de las personas o bienes objeto de protección, o cuando concurran indicios racionales de la comisión de un delito o infracción.

En el caso de una actuación fuera del área de acción, por ejemplo, en el exterior del inmueble del que el agente haya sido encargado custodiar, se recogen ciertas excepciones. Por ejemplo, cuando sea necesaria una persecución a delincuentes sorprendidos en flagrante delito, también consecuencia del cumplimiento de sus funciones.